sábado, 10 de enero de 2015
No juzguéis a los demás si no queréis ser juzgados. Porque con el mismo juicio que juzgareis habéis de ser juzgados, y con la misma medida que midiereis, seréis medidos vosotros. No juzguen a los demás, y no serán juzgados. 2 Pues serán tratados de la misma forma en que traten a los demás.[a] El criterio que usen para juzgar a otros es el criterio con el que se les juzgará a ustedes.[b]3 »¿Y por qué te preocupas por la astilla en el ojo de tu amigo,[c]cuando tú tienes un tronco en el tuyo? 4 ¿Cómo puedes pensar en decirle a tu amigo: “Déjame ayudarte a sacar la astilla de tu ojo”, cuando tú no puedes ver más allá del tronco que está en tu propio ojo? 5 ¡Hipócrita! Primero quita el tronco de tu ojo; después verás lo suficientemente bien para ocuparte de la astilla en el ojo de tu amigo.6 »No desperdicies lo que es santo en gente que no es santa.[d] ¡No arrojes tus perlas a los cerdos! Pisotearán las perlas y luego se darán vuelta y te atacarán.
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